RESEÑA | MARTINA EN TIERRA FIRME (HORIZONTE MARTINA II) DE ELÍSABET BENAVENT
Sinopsis (con posibles spoilers):
Martina es un mar de dudas. Ha roto radicalmente su comunicación con Pablo, ha dejado el Mar, pensaba que lo que tenía con el chef era especial y es duro reconocer que tal vez no es como te habías imaginado. Se ha dado cuenta de que se ha dejado llevar por alguien que es emocionalmente frenético y se siente avergonzada por haber perdido el norte por alguien que ni siquiera ha solucionado del todo su pasado. Sin embargo Martina ha huido y decide olvidarlo todo, pero no será tan fácil borrar de su vida ni a Pablo ni el Mar... algo se está gestando en su interior y no tiene el valor de afrontarlo. Tiene que tomar una decisión y está en juego su futuro.
Por otro lado Amaia y Javi siguen en su eterno tira y afloja, él está enamorado de ella y ella no se atreve a tener con «su mejor amigo» una relación aunque se muere cada vez que él la acaricia, ¿conseguirán dejarse llevar?
Sandra no quiere más decepciones y cree que ha llegado el momento de recuperar lo perdido: a su novio de toda la vida, Íñigo, pero ¿conseguirá ser honesta a lo que le dicta el corazón?
Mi opinión sobre el libro:
Martina en tierra es la segunda y última entrega de la bilogía Horizonte Martina, escrita por una de mis autoras españolas favoritas, Elísabet Benavent.
Como me sucedió en la reseña de Martina con vistas al mar, la primera parte de la bilogía, no sabía como comenzar a reseñar esta novela. Este libro fue un libro que despertó en mí muchos sentimientos, muchas sensaciones, pensamientos, miedos, deseos y anhelos. Así que, después de tanto escribir, aquí está mi reseña.
La novela comienza justo donde terminó; y después de ese final, que fue impresionante, estaba deseando leer con todas mis fuerzas esta última parte.
Martina se encuentra perdida, sin rumbo, con un futuro incierto, que no sabe si saldrá bien parada de el. Se encuentra sin fuerzas y sin ganas de hacer nada, ni de hablar con nadie. Como al igual que Pablo, éste está desesperado, haciendo todo lo posible e imposible por hablar con Martina, su faro entre la niebla, su viento de cara, su matemática de la carne... su futuro, su todo.
Pero ahora hay nuevas situaciones a las que ambos tienen que enfrentarse, y no serán para nada fáciles. Es él, quien entre medio de tanta vorágine, tira para adelante, a pesar del miedo que ambos tienen ante estas nuevas circunstancias. Cuando todo parece estar en orden, nuevamente todo se desmorona, se cae, y los antiguos miedos de Martina, junto con su forma de ser, lo hacen todo aún peor.
Desde un primer comienzo sabía que este libro iba desequilibrarme emocionalmente, solo que no me esperaba tanto. Desde que comencé el libro, hasta la mitad del mismo, me vi sumergida en la vorágine de lo que es la vida de Pablo y Martina, en sus sentimientos, miedos, deseos, anhelos e inseguridades. La autora nos muestra, nos hace sentir, palpar, cada una de sus emociones y sentimientos, en un ritmo de lectura más pausado, justamente para que sentimos todo eso y más.
Por lo que, a medida que avanzaba en la lectura, mi cuerpo se encontraba totalmente entumecido, mi mente y mi corazón se encontraron con los corazones de los personajes, y empecé a sentir, en primera persona, lo que ellos sentían. Tal es así, que hacia el final del libro, antes del epílogo, los ojos se me llenaron completamente de lágrimas y ya no pude pararlas. Por más que lo intentara.
Pablo y Martina, de verdad, me llegaron al corazón; se metieron en mi piel, en mi cabeza y en mi vida, como un tornado que destruye todo a su paso.
Sin dudas, la joya de esta entrega es Pablo Ruíz, y sí, también Martina. Estos dos personajes, estas dos personas que se enamoraron casi en un pestañeo, sin tener en cuenta los relojes, que si vieron en sus peores y mejores momentos, que comprobaron cómo era estar con y sin el otro, una pareja que tuvo la oportunidad de hablar de todo y de nada, sí, estos dos personajes me enseñaron mucho. De eso, no me cabe ninguna duda.
Como dije en el párrafo anterior, la joya de esta corona es, sin dudas, Pablo. Pablo... un personaje lleno de vida, de optimismo, un enamorado del amor... que a pesar de estar sufriendo sigue con todo lo que lo caracteriza. Un personaje que si bien al principio no me cerraba, aquí, en esta novela, lo amé. Amé cada palabra, cada línea, cada párrafo en el que él y sus palabras aparecían. Amé su forma de enfrentar sus miedos, pero sobre todo, amé como intentaba hacer reaccionar a Martina. Martina... un personaje que me desesperó en más de una ocasión; pero al conocerla, se entiende su forma de ser, su forma de accionar y el terror que la paraliza ante las nuevas circunstancias que la vida le puso adelante. Este ser tan cuadriculado, que a sus treinta años vive lo que no vivió en su adolescencia: la intensidad de amar, de vivir, la irresponsabilidad, descubrir el deseo por otra persona de una manera arrolladora, concentrar los miedos e ilusiones en otro. Y aunque en su mayoría no estuve de acuerdo en su forma de accionar, logré sentir sus emociones y desesperación por no poder expresar lo que siente a viva voz.
En esta entrega volvemos a estar acompañados de Javi, Amaia, Sandra y Fer. Unos personajes secundarios muy bien logrados, que consiguieron que la historia sea aún más especial.
Tengo que decir, sobre todas las cosas, que la forma de escribir de la autora es sublime. Es lo que más me gusta de los libros de Elísabet: su forma de narrarnos sus historias; con ese lenguaje tan directo y con unas frases que te hacen reír y otras, pensar hasta decir basta. Y la frutilla de la torta se la lleva esa cercanía que tiene Beta coqueta a la hora de hablarnos a nosotras, las mujeres. La forma en la que plantea ciertos temas que son por excelencia, lo que una mujer desea leer y saber. Y no podía terminar esta reseña sin comentarles esto. La forma en la que maduró Elísabet a la hora de narrar es impresionante. Y si no me creen, Martina en tierra firme los está esperando. No me cabe ninguna duda de que todo lo que toca Elísabet Benavent con sus manos lo convierte en algo mágico. Y más si son epílogos.
Para cerrar, solo quiero decir gracias. Gracias Elísabet por crear tan hermosas historias, por hacernos sentir, gracias por tan increíbles personajes, personajes que quedarán para siempre en nuestros corazones.
Estrellas:
4.5/5
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